constituyendo cada uno de ellos una fuente interferente para los diversos sistemas audiovisuales
que dispongamos. Como no podía ser de otra manera, en los equipos de audio el problema de las
interferencias EMI esta muy presente y en la medida que se adopten soluciones para ello obtendremos
una mayor calidad de sonido.
Un papel muy importante para ello lo desempeñan el propio cableado y las diversas conexiones
de la instalación de sonido que hagamos. El cable en si mismo juega un papel tan importante
incluso como los propios instrumentos. Más allá de que el conector sea de oro o no, lo que realmente
importa es si el cable esta apantallado y el esquema de captación de señal utilizado hacia los amplificadores
de sonido.
Cuanto mayor sea el grado de apantallamiento mejor, es decir podríamos tener una malla para el vivo
y otra para el retorno de corriente. Una conexión no balanceada de esta manera , en la cual la malla
solo este llevada a masa en uno de los extremos, y el hecho de que las distancias de cableado suelen
superar los 5 metros pueden dar lugar a fuentes de ruido en nuestra señal de audio importantes.
Por ello es importante que la conexión sea balanceada y que se rompa el bucle de corriente generado
por masas diferentes,esto se logra conectando la malla de los cables de audio a masa, en ambos extremos,
siendo la fuente de sonido,por ejemplo un micrófono, y el otro extremo el correspondiente a la entrada del amplificador.

Aunque el apantallamiento es una medida que ayuda a limpiar nuestra señal de audio, no es la solución
definitiva ya que las interferencias de origen magnético no se pueden eliminar y constituyen otra
fuente de ruido.
Si nuestro grado de obsesión por la pureza de sonido es muy alto, siempre podremos utilizar
cableado optico multimodo donde sea posible. Las ventajas de la fibra óptica en compatibilidad electromagnética sobre cualquier otro coaxial son de sobra conocidas en el mundo de las comunicaciones, al ser la conexión por luz, no existirá acoplamiento electromagnético por ninguna fuente de ruido.
Otra opción empleada en mundo del audio digital, es la utilización de amplificadores de sonido en base
a válvulas, en lugar de amplificadores de transistores, una ventaja en este caso es la eliminación
del ruido térmico asociado al proceso de amplificación. En cambio, la distorsión de sonido que producen
los amplificadores de válvulas debido a la necesidad de transformadores, es prácticamente inapreciable
para el oído. De ahí que tengan buena fama entre los músicos.
De todas formas, no deja de ser en realidad una obsesión de los músicos por los componentes antiguos,ya que en realidad los amplificadores operacionales basados en transistores se siguen empleando con muy buenos resultados en gran parte del procesado del audio, tales como en las tarjetas de sonido para pcs, dando buenos resultados en la creación musical o formando parte de un estudio de grabación. Hasta existen foros, donde se debate que amplificadores operacionales pueden reemplazarse para influir en la calidad de sonido.
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